Tras toda una noche de negociaciones, la Unión Europea llegó el martes a un acuerdo político para imponer un arancel sobre las emisiones de dióxido de carbono a las importaciones de productos contaminantes como el acero y el cemento, un plan pionero en el mundo, destinado a apoyar a las industrias europeas en su proceso de descarbonización.
Los negociadores de los países de la UE y el Parlamento Europeo llegaron a un acuerdo sobre la ley que impondrá costes por las emisiones de CO2 a las importaciones de hierro y acero, cemento, fertilizantes, aluminio y electricidad.
Las empresas que importen estos productos a la UE deberán comprar certificados que cubran sus emisiones de CO2. El plan está diseñado para aplicar el mismo coste de CO2 a las empresas extranjeras y a las industrias nacionales de la UE —estas últimas ya están obligadas a comprar permisos en el mercado de carbono de la UE cuando contaminan.
Mohammed Chahim, principal negociador del Parlamento Europeo sobre la ley, dijo que la tarifa fronteriza sería crucial para los esfuerzos de la UE en la lucha contra el cambio climático.
«Es uno de los únicos mecanismos que tenemos para incentivar a nuestros socios comerciales a descarbonizar su industria manufacturera», dijo Chahim.
El objetivo de la tasa es evitar que la industria europea se vea perjudicada por productos más baratos fabricados en países con normas medioambientales menos estrictas.
También se aplicará al hidrógeno importado, algo que no figuraba en la propuesta original de la UE pero que los eurodiputados impulsaron en las negociaciones.
Algunos detalles de la ley, incluida su fecha de entrada en vigor, se determinarán esta semana en las negociaciones sobre la reforma del mercado comunitario del carbono.
En la actualidad, la UE concede permisos de CO2 gratuitos a la industria nacional para protegerla de la competencia extranjera, pero tiene previsto suprimirlos cuando se introduzca gradualmente el arancel fronterizo sobre el carbono, a fin de cumplir las normas de la Organización Mundial del Comercio. La rapidez de esta introducción se decidirá en las negociaciones sobre el mercado del carbono.
Bruselas ha dicho que los países podrían quedar exentos si tienen políticas de cambio climático equivalentes a las de la UE, y ha sugerido que Estados Unidos podría eludir el gravamen por este motivo.
Con todo, el plan de la UE ha recibido críticas de países como China, y se produce en un contexto de tensiones comerciales crecientes con Estados Unidos por las subvenciones de la Ley de Reducción de la Inflación a las tecnologías verdes, que según el bloque podrían perjudicar a las empresas europeas.
El arancel forma parte de un paquete de políticas de la UE destinadas a ayudar al mundo a evitar las consecuencias más desastrosas del cambio climático, reduciendo para 2030 las emisiones comunitarias en un 55% respecto a los niveles de 1990.
Fuente: Infobae, 13 de Diciembre de 2022
La UE logra un acuerdo sobre el primer arancel mundial al carbono en frontera – Infobae