Los partidos regionales españoles consiguieron el jueves la exención de las actividades reguladas de las grandes empresas energéticas del plan temporal de impuestos a los beneficios extraordinarios del Gobierno, según un documento conjunto.
Varias empresas energéticas habían amenazado con llevar al Gobierno a los tribunales si se aprobaba la tasa —un impuesto del 1,2% sobre las ventas de las empresas eléctricas- en su forma original.
En el nuevo texto, las actividades reguladas, que incluyen la electricidad, el gas y el gas licuado de petróleo (GLP), no estarán sujetas al impuesto y tampoco lo estarán los importes netos de negocio de las redes de transporte y distribución de electricidad y gas natural.
Los cambios han sido propuestos en una enmienda del PNV y el PdCat, y forman parte de un proyecto de ley que también grava a los bancos para recaudar ingresos y ayudar a los hogares a hacer frente a la presión del coste de la vida.
El Gobierno minoritario de izquierdas del presidente Pedro Sánchez está intentando ampliar el apoyo parlamentario para aprobar el proyecto de ley, que pretende recaudar 7.000 millones de euros (7.230 millones de dólares) en 2023 y 2024 de los bancos y las empresas energéticas.
Las enmiendas también prevén que la facturación de los negocios de las energéticas en el extranjero quede excluida del ámbito de la ley.
El Congreso aún debe aprobar el proyecto de ley antes de enviarlo al Senado.
(1 dólar = 0,9688 euros)
(Reporte de Emma Pinedo; edición de Jesús Aguado, Mark Heinrich y Kirsten Donovan, editado en español por José Muñoz en la redacción de Gdańsk)
Fuente: Infobae, 19 de Noviembre de 2022