Las urnas parecen abocar a un escenario de bloqueo y repetición de elecciones, aunque no es descartable un Gobierno de izquierda apoyado por los partidos nacionalistas

Se confirma uno de los escenarios que temían los españoles, una previsible repetición de elecciones por la imposibilidad de los dos partidos mayoritarios para encontrar los apoyos suficientes para gobernarLa suma de los dos bloques, PSOE-Sumar y PP-Vox, no es suficiente para acercar a una a la Moncloa, pero sí para bloquear que lo haga la contraria.

Posible pacto liderado por el PP

El PP podría sumar sus 136 escaños con los 33 de Vox y los de Coalición Canaria y Unión del Pueblo Navarro, uno cada formación. En total 171, cinco menos de los necesarios para la mayoría absoluta. En una segunda votación, Fejióo necesitaría más síes que noes. La presencia de Vox en el Gobierno, que Santiago Abascal ha adelantado en campaña que pedirá a cambio de sus votos, hace complicado que el Partido Popular encuentre apoyo en otras formaciones. Uno de los partidos en los que PP ha encontrado un aliado en pasadas legislaturas en las que ha gobernado es el PNV. Sin embargo, su candidato, Aitor Esteban, ha afirmado durante la campaña que no van a dar sus síes a un Ejecutivo en el que esté presente Vox o que llegue a la Moncloa con el apoyo de la ultraderecha. Se da la circunstancia, además, de que PNV tiene en el horizonte unas elecciones autonómicas en las que se le podría penalizar, en favor de Bildu, si con su apoyo llega la ultraderecha al Ejecutivo.

En situación similar está Junts, formación heredera de CIU, en quien el PP ha encontrado apoyos en otros procesos electorales. Tanto los populares como Vox han atacado en los últimos años al líder de los independentistas, Carles Puigdemont, y han hecho de la cuestión catalana uno de sus caballos de batalla contra Pedro Sánchez. Santiago Abascal, además, ha asegurado durante la campaña que si están presentes en el Gobierno volverán las tensiones a Cataluña.

Posible pacto liderado por PSOE y Sumar

En el bloque contrario, el PSOE tiene más variedad de partidos con los que pactar, pero aún así no llega a la mayoría. A sus 122 le sumaría los 31 de Sumar, su socio en el Gobierno de coalición. En total 153, por lo que necesita 23 escaños para la mayoría absoluta. Si se tiene en cuenta lo que pasó en las últimas elecciones, algunos de ellos los puede encontrar en PNV (5) y BNG (1). En este escenario, la clave está en los partidos nacionalistas catalanes, con siete escaños cada uno, y en Bildu (6). Si todos dan su apoyo a Sánchez, rebasarían la mayoría absoluta hasta llegar a los 179 escaños. Pero se da la circunstancia que todos votaron en contra de la reforma laboral, una de las leyes estrellas del Gobierno saliente. Si una de las formaciones catalanas, por ejemplo Junts con la que el PSOE ya ha llegado a acuerdos anteriores en administraciones catalanas, votara a favor, serían 166 votos, dos menos que los que reúnen las derechas, que se impondrían en noes. Por lo que a Sánchez le hace falta que al menos otra de las formaciones nacionalistas vote a su favor y la tercera se abstenga.

Lista más votada

Ante la posibilidad de un escenario de bloqueo, el candidato del Partido Popular, Alberto Núñez Fejióo, ha repetido durante toda la campaña electoral que debería dejarse gobernar a la lista más votada, que todas las encuestas señalaban que iba a ser la suya, como han confirmado las urnas. Para que esta petición se convirtiera en una realidad, sería necesario la abstención del PSOE, algo que su candidato, Pedro Sánchez, ya ha dejado claro que no va a pasar. Pero algunas voces de barones de partido, entre ellas la del expresidente Felipe González, han sugerido que sería una buena opción para así evitar la presencia de la ultraderecha en el Gobierno. Cabe recordar que los socialistas propiciaron con su abstención que Mariano Rajoy fuera reelegido presidente. Una decisión que acabó con la salida como líder de la formación de Pedro Sánchez, que acto seguido cogió su coche para recorrer España y a los meses volvió triunfante a la sede de Ferraz primero y a la presidencia del Gobierno después.

Posible repetición electoral

Con este escenario de bloqueo toca pensar en una más que probable repetición electoral, salvo sorpresa. El Congreso se constituirá en los siguientes 25 días tras las elecciones, es decir, el 17 de agosto. Es la sesión en la que tanto diputados como senadores juran sus cargos. A partir de entonces comienzan las rondas de reuniones de los representantes políticos con el Rey para decidir a quién le encarga Felipe VI la formación de Gobierno. Por lo que el Debate de Investidura podría ser, de haber un candidato, a finales de agosto o, lo más probable, a inicios de septiembre. Si la persona que se somete a la investidura no logra los apoyos necesario en ninguna de las dos votaciones, comienza un plazo de dos meses para intentar encontrar otra opción, ya sea otro candidato o el mismo.

Si esta plazo también se agota sin que se haya un nuevo presidente del Gobierno, las Cortes se disuelven en noviembre y habría que volver a celebrar elecciones a los 47 días de la disolución, lo que ya sería en una fecha próxima a Navidad. En noviembre de 2016, se modificó la LOREG, ley que rige los procesos electorales, y se introdujo una disposición adicional que regulaba qué sucedía si había que repetir los comicios. Se acortan los plazos, de 54 a 47 días, para la convocatoria y la campaña dura solo 8 días, frente a los 15 de la que acaba de terminar.

Fuente: Cinco días

https://cincodias.elpais.com/economia/2023-07-23/estos-son-los-posibles-pactos-para-gobernar-segun-los-resultados-de-las-elecciones-generales.html

Por Bolivia