El nuevo Govern del PP aprueba con carácter inmediato una medida para la que estima un impacto de 60 millones
La batalla fiscal entre las comunidades autónomas da un nuevo salto, a pocos días de celebrarse las elecciones generales y llega ahora a las Islas Baleares. El Govern, que cambió del PSOE al PP en los comicios del 28 de mayo, se presenta como ariete del argumentario de Génova en rebajas tributarias y ha anunciado la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones de padres a hijos, abuelos a nietos y entre cónyuges, y ha reducido el impuesto de transmisiones patrimoniales en la compra de primeras viviendas para jóvenes y personas con discapacidad.
Se une así a Andalucía, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Extremadura, Murcia y Madrid, en cuanto a las ventajas para herederos del llamado Grupo II y choca con otras propuestas como la de Sumar, que propone la unificación de este tributo.
“Es urgente bajar impuestos a las familias”, ha subrayado la jefa del ejecutivo y líder del PP de las islas, Marga Prohens, quien ha remarcado que con la reforma, que entra en vigor este mismo martes, Baleares tendrá el impuesto de sucesiones y donaciones más bajo del país, según recoge Efe.
Prohens ha convocado un Consell de Govern extraordinario para aprobar por decreto ley la eliminación “del impuesto más injusto que hay, que grava el trabajo y el esfuerzo de padres y abuelos”, una medida que supondrá un ahorro fiscal de 60 millones de euros, ha destacado.
El decreto ley, que tendrá que ratificar el Parlament en el plazob de un mes, supone el cumplimiento de su promesa de que antes de acabar julio habría adoptado la principal iniciativa de una reforma tributaria que será más amplia y continuará en los próximos meses, ha enfatizado.
En el caso de las herencias entre hermanos o de tíos a sobrinos, el impuesto de sucesiones se reduce a la mitad si los fallecidos no tienen descendencia y un 25 % cuando sí dejan descendientes.
Estos cambios tributarios, ha detallado Prohens, se aplican tanto en herencias por causa de muerte como en las de los pactos sucesorios o “herencias en vida”, que tienen una regulación propia en el derecho civil balear.
En el mismo decreto se ha incluido la eliminación del impuesto de transmisiones patrimoniales para la compra de la primera casa por parte de menores de 30 años y personas con discapacidad, con un límite de renta anual de 52.800 euros en declaración individual o de 84.480 euros en declaración conjunta, y siempre que el precio de venta no supere los 270.151 euros.
Este impuesto se reduce a la mitad para la compra de vivienda habitual por parte de personas de entre 31 y 35 años, familias numerosas o monoparentales y familias con discapacitados a cargo, cuando la casa no cueste más de 270.151 euros (350.000 euros en el caso de las familias numerosas), ha precisado el Govern en un comunicado.
Prohens ha cifrado en 15 millones de euros la reducción prevista de la recaudación tributaria por esta reforma del impuesto de transmisiones y ha defendido que las arcas públicas pueden afrontar esta merma porque las ingresos fiscales se han disparado por la inflación.
Fuente: Cinco Dias