EXPERTOS DICEN QUE EL ALZA SE DEBIÓ A LA INVASIÓN DE RUSIA A UCRANIA

En diciembre del año pasado, el Gobierno presupuestó que la subvención por los hidrocarburos y alimentos para este 2022 alcanzaría los 5.088 millones de bolivianos (737 millones de dólares), pero la gestión cerró con el doble y alcanzó los 1.500 millones de dólares. Expertos advierten que este incremento se debió al encarecimiento de las materias primas debido a la invasión rusa a Ucrania.

“El esquema de subvención no lo aplicamos recientemente, lo venimos haciendo hace muchas gestiones. Este año, en términos de esfuerzo, fue el más importante para el Tesoro General de la Nación (TGN) tanto de energéticos como de alimentos. En global, suman 1.500 millones de dólares”, declaró el ministro de Economía, Marcelo Montenegro.

En el PGE 2022, que se presentó en diciembre del año pasado, el Gobierno estimó que la subvención alcanzaría los 5.088 millones de bolivianos. Esperaba que 4.794 millones (94,1%) se vaya a los hidrocarburos; 168,1 millones (3,4%), a los alimentos; y 125,6 millones (2,5%), a los servicios básicos.

Sin embargo, estas previsiones se duplicaron y Montenegro reconoció este incremento en la evaluación de la economía que hizo el martes. “Lo decíamos en la presentación del programa fiscal financiero del Banco Central de Bolivia (BCB) de marzo del 2022. Nosotros habíamos contemplado que esto (el incremento de la subvención) sería un elemento presente esta gestión, debíamos tomar las previsiones y las hemos tomado. Esa es la razón por la cual dimos un ambiente de estabilidad a la economía para que los agentes económicos sigan produciendo. Lo contrario, en un ambiente inflacionario, se hacen difíciles las actividades económicas”, dijo.

El analista económico, Gabriel Espinoza, explicó que este incremento se debe a la elevación de los precios internacionales de los hidrocarburos y los alimentos; sobre todo de granos como el maíz o el trigo y de los que Bolivia es importadora. “El alza (de precios) se trató de contener a través de los subsidios, tanto a los productores como comercializadores a través de Emapa”, puntualizó.

En el caso de los hidrocarburos sucedió lo mismo. “Se tenía presupuestado que el costo del barril rondaba los 50 dólares. En diciembre de 2021 ya se observó el error de estimación porque ya estaba por los 75 dólares y obviamente con la invasión (de Rusia a Ucrania) se disparó este producto por encima de los 100 dólares el barril. Por tanto, esto impactó en el costo de importación de diésel y gasolina”, explicó.

En Bolivia, el precio de los carburantes está congelado desde hace 16 años. “Hay un fuerte incentivo al contrabando porque (en) los países vecinos el precio fluctúa de manera relativamente libre en función al mercado. En algunos casos hay subsidios, pero no como Bolivia, que mantiene un precio fijo. Entonces, hubo un incremento del costo de la importación de hidrocarburos y hay que agregar un mayor contrabando de los hidrocarburos a los países vecinos. En consecuencia, el consumo de hidrocarburos creció y el subsidio fue muy alto”.

El Gobierno estimó que para 2023 la subvención a los hidrocarburos y alimentos sea de 8.072,2 millones de dólares (1.170,8 millones de dólares). El 94% va a hidrocarburos y el restante a los alimentos.

De acuerdo con los datos oficiales, la subvención para el diésel será de 4.705 millones de bolivianos; los insumos y aditivos para la gasolina, en 2.637 millones; el incentivo a la producción del petróleo, en 157 millones; el gas licuado de petróleo (GLP), en 106 millones; y el gas oil, en 37 millones. Esto suma una subvención para el sector de los hidrocarburos en 7.642 millones.

El ministro Montenegro afirmó que reducirán la subvención para el 2023 con la puesta en marcha de planta con tecnología FAME de biodiésel que se instalará en Santa Cruz. “Seguro que a fines de noviembre y diciembre del 2023 va a mostrar un funcionamiento que permitirá un ahorro de 100 millones”, dijo.

También indicó que comprarán de industrias nacionales 200 millones de litros de etanol para ahorrar más de 200 millones de litros de gasolina importada. Asimismo, el ministro indicó que la planta del Mutún ahorrará al país en la producción de laminados de acero y los gastos que se tienen en la importación de acero para la construcción. “Tenemos varios proyectos que van a ir dando los resultados y que fuimos anunciando hace dos años atrás. Tenemos como elemento central en el modelo de la presente gestión de Luis Arce sustituir las importaciones e industrializar el país”, sostuvo.

Fuente: Pagina Siete: 23 de Diciembre de 2022

La subvención llegó a $us 1.500 millones, el doble de lo previsto (paginasiete.bo)

Por Bolivia