No menciona una sola palabra sobre cobrar impuestos a los cocaleros. El presidente del Impuestos señala que debe indagar la Copa Evo porque la ley se lo faculta y no es por perjudicarlo. Pidió información hace meses y no se la remitieron
El Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) realiza una investigación a la Coordinadora de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba-como persona jurídica, según recalcó Mario Cazón, presidente del SIN- para determinar si cumplió con la norma tributaria vigente en la organización de la Copa Evo 2022 de Fútbol Sub-17, que se desarrolló del 31 de julio al 7 de agosto de este año, en campos deportivos de Chapare y en el Centro de Alto Rendimiento de Villa Tunari.
Asambleístas opositores solicitaron también que Impuestos indague la adquisición que gestionaron las Seis Federaciones de Cocaleros del Trópico de Cochabamba del club Palmaflor, que participa en el torneo profesional de fútbol que organiza la Federación Boliviana de Fútbol.
Cazón manifestó que la investigación está a cargo de la Gerencia Distrital Cochabamba y que los servidores públicos asignados al caso “van a valorar de manera técnica, de manera objetiva, siempre en el marco de la normativa, cómo se ha llevado adelante ese evento y determinar si cumplió con la normativa tributaria vigente en el país”.
Durante la conferencia de prensa, el presidente de Impuestos mostró imágenes de entradas vendidas para partidos de la Copa Evo y negó que se esté investigando a Evo Morales o que se quiera afectar su imagen. Desde el SIN explican que la venta de entradas es el hecho generador de una obligación tributaria: el pago del Impuesto al Valor Agregado (IVA).
“El Servicio de Impuestos Nacionales solicita información sobre un evento deportivo, el cual ha tenido la denominación de Copa Evo. Este requerimiento se lo hace el 12 de agosto de 2022 a la Coordinadora de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba”, detalló Cazón.
Más adelante indicó que esa organización cuenta con un Número de Identificación Tributaria (NIT) sin fines de lucro. Sin embargo, dado que fue la organizadora de un evento deportivo, “Impuestos Nacionales le solicitó información sobre el precio y numeración de las entradas vendidas, documentación original sobre los gastos para realizar ese evento, información contable, entre otros documentos”.
Esta solicitud se efectuó en el marco del Artículo 66 de la Ley Nº 2492 (Código Tributario Boliviano) que faculta a la Administración Tributaria a “realizar el control, comprobación, verificación, fiscalización e investigación”.
La Coordinadora de las Seis Federaciones promovió la organización del campeonato que contó con la presencia de equipos nacionales e internacionales.
La semana pasada, el MAS denunció que el presidente del SIN intentaba involucrar a Evo Morales en un caso de deuda impositiva para “dañar” su imagen. Y le pidieron que deje de amedrentar y amenazar con la destitución a los funcionarios porque se niegan a ser utilizados.
Desde la oposición, Comunidad Ciudadana (CC) señaló que no solamente debe investigarse este caso, sino también la compra del club de fútbol Palmaflor.
“Vamos a pedir a Impuestos que investigue todo lo que tenga que ver con la transferencia de este equipo de fútbol de los mineros auríferos a las Seis Federaciones de Cocaleros. También exigiremos que se indague a través de la UIF, tanto al club Palmaflor, como también a la Copa Evo”, manifestó el diputado José Ormachea, de Comunidad Ciudadana.
En ningún caso, Impuestos ha sugerido siquiera la posibilidad de que los productores de coca puedan pagar tributos por su negocio. Son alrededor de 49.500 afiliados a las Seis Federaciones y cada uno realizará un aporte mensual entre Bs 1 y 2 para que el club Atlético Palmaflor sea financiado. El documento de compra señala que las Federaciones tendrán la administración del equipo. Morales es el presidente del plantel de fútbol y en los próximos días buscarán quién será el director técnico.
Fuente: El Deber, 22 de Noviembre de 2022
Impuestos indaga la Copa Evo y la oposición pide que vea el caso de Palmaflor | El Deber