Centenares de agentes fronterizos de los países de América Latina asistieron al taller sobre “Gestión coordinada de fronteras y facilitación del comercio a través de la seguridad en la cadena de suministro”, que se realizó en forma virtual los pasados días 17, 19 y 21 de octubre.
La iniciativa, impulsada por el Comité Interamericano contra el Terrorismo (CICTE) de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y el Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (SELA), buscó principalmente compartir experiencias regionales que promuevan e incentiven la coordinación y cooperación en la implementación de estándares internacionales relacionados con la seguridad de la gestión de fronteras.
El fortalecimiento de esta tarea que implica la coordinación de los servicios públicos y del sector privado para mejorar el control fiscal, la seguridad fronteriza y la facilitación del comercio, así como el tránsito de personas, es uno de los desafíos regionales actuales, que requiere hacerse conjuntamente.
Asimismo, Botet destacó las palabras del Secretario permanente del SELA referidas a la importancia de la cooperación internacional e interinstitucional. En este marco, comentó que las autoridades aduaneras de Uruguay y de Guatemala, dieron a conocer en la primera sesión sus experiencias nacionales y regionales en lo referido a la seguridad de la cadena de suministros, así como también su proyección y sus retos en el control fronterizo.
La gestión coordinada de fronteras alcanza a todas aquellass sean terrestres, marítimas, aéreas, interiores, como un conjunto interconectado. En este sentido, las autoridades aduaneras de los países arriba mencionados destacaron que para el comercio seguro “las zonas francas son fundamentales”. En tanto, Antigua y Barbuda – uno de los trece países que forman la América Insular- compartió las amenazas y los riesgos para la protección marítima tales como el tráfico ilícito y la pesca ilegal.
La segunda sesión del taller se dividió en cinco grupos, continuó la Secretaria Ejecutiva Adjunta de CICTE. El primer grupo se enfocó en la sensibilización del sector privado a través del Programa del Operador Económico Autorizado. La cooperación de las aduanas con las empresas “es esencial” para ofrecer una alta garantía de seguridad con respecto a su misión en la cadena logística.
En tanto, el segundo grupo se enfocó en la coordinación entre las aduanas y otras agencias públicas involucrados en el comercio internacional y en la seguridad de la cadena logística. A saber, los participantes resaltaron tres pilares fundamentales de las aduanas: facilitación del comercio, control de la entrada y salida de la mercadería y recaudación. Así, la Administración Nacional de Aduanas de Panamá desarrolló los avances en materia de integración y facilitación del comercio en la región centroamericana y destacó cómo la digitalización ha sido una herramienta fundamental para los trámites arancelarios.
Asimismo, el grupo tres se enfocó en el fortalecimiento de seguridad de la cadena de suministro y como mejorar la facilitación al comercio. Para ello, se ilustró con la experiencia de Colombia, resaltándose los siguientes hallazgos:
• Importancia del compromiso con el acuerdo de facilitación de la OMC,
• Medidas necesarias para superar la crisis producida por la pandemia
• Profundizar el programa del Operador Económico Autorizado (OEA)
• Beneficios de los acuerdos de reconocimiento mutuo
• Planes para exportadores de micro, medianas y grandes empresas
• Estrategia integral contra el narcotráfico.
El cuarto grupo se focalizó en la seguridad integral de fronteras con un enfoque en la facilitación del comercio a través de la seguridad de la cadena de suministro. A este respecto, se analizaron los diseños de la tecnología de información para el mejoramiento de la integridad y la inclusión social. También, la plataforma que ofrece la Organización Mundial de Aduanas y algunos participantes compartieron su experiencia para tal efecto.
Por último -concluyó Botet-, el grupo cinco se enfocó en la cadena de suministro y la comunidad portuaria. Para lo cual, se invitó a cambar el pensamiento referido a que “nunca pasa nada” y se alentó a cumplir los procedimientos establecidos en los acuerdos internacionales, que aseguren el movimiento de mercancías con el propósito de facilitar el comercio. También se repasaron lo pasos necesarios para la protección portuaria.
El evento puso de manifiesto el compromiso de OEA- CICTE por promover el intercambio de experiencias y mejores prácticas en seguridad de la cadena de suministro, la protección marítima y la gestión integrada de fronteras. Además, puso de relieve el espíritu de cooperación dentro de la propia Secretaría General de la OEA y la importancia de colaborar con organismos regionales como el Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (SELA).
Fuente: Aduana News, 24 de Octubre de 2022